Proyecto de FoodCultura, coordinado por Chu Uroz.
FoodCultura y Moritz presentaron el stand CAN POTATO, dando su apoyo al declarado por la ONU como “Año Internacional de la Patata 2008”, con el apoyo de la FAO y otras instituciones.
Tanto la patata como la cerveza y la avena tienen historias milenarias, por eso celebraron su encuentro en la Feria Internacional de Moda “Bread & Butter”. El concepto en torno a CAN POTATO nace de mi colaboración, de la mano de FoodCultura y el equipo Moritz.
CAN POTATO fue una “Oda a la Papa”, como diría Pablo Neruda, un homenaje a este alimento ancestral. La gran M de Moritz se transformó en un simbólico Museo de la Patata, un lugar de degustación, reflexión y celebración de este humilde tubérculo de más de 8.000 años, originario de la zona Andina de América del Sur y que hoy en día, una vez más, crea conciencia de la fusión vital entre la agricultura, la economía y la seguridad alimentaria mundial.
La imagen de una gran patata tatuada con la M de Moritz sirvió de abanico y menú para presentar las diferentes especialidades: piel de patatas al horno, pieles de patatas rellenas, patatas con caviar, patatas violetas con oro, cucurucho de patatas cocidas con cerveza y no faltaría la tortilla de patatas, una sopa fría o “Papachoise”, entre otros.
